Arica Nativa nació lejos de las ciudades, compartiendo bellas películas en comunidades andinas, en los valles, precordillera y altiplano de Arica y Parinacota, mientras restaurábamos patrimonio, con barro, piedras y paja brava.
 

Tras 19 años de buen caminar y muchas amistades, Arica Nativa sigue siendo un festival muy raro, un modesto festival de películas nativas que busca algo tan potente y necesario como enamorar a las nuevas generaciones de conservar los tesoros naturales y culturales del planeta, que custodian comunidades lejos de las ciudades.

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Nos preguntan qué significa ser Nativa o Nativo. Y respondemos repitiendo lo que nos transmitió gente sabia que hemos conocido en el camino: ser en el mundo con humildad y alegría, conectados con la Madre Tierra y los antepasad@s, mirando el futuro con la mirada en el origen, siempre rebeldes y entusiastas por lograr un mundo más comunitario, justo y sostenible. El ícono del festival es un geoglifo dejado por las viejas culturas andinas en el valle de Lluta, cerca de Arica, que marca el camino para los antiguos caravaneros que conectaban altiplano y costa, las troperas y troperos que iban por el mundo compartiendo esfuerzo, su cultura y su amistad.

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En 2024 cumplimos 19 años, e invitamos con especial entusiasmo a las artesanas y artesanos del audiovisual, filmmakers activistas del planeta, a crear juntos este festival de películas nativas, dedicado con cariño a las comunidades rurales e indígenas del mundo, que hoy, más que nunca y con urgencia, debemos escuchar atentamente…

 

Que sea en buena hora, Jallalla!​